ILUSTRADORA CAMPANITAAA

Dedicada a lo que ama

Magalí Eliana Medina Dobarro es una ilustradora conocida como Campi, Campa, Belly e 
incluso Bambi. Nació en Lanús, partido de Buenos Aires, el 15 septiembre de 1989.

Estudia actualmente la licenciatura para ser arquitecta en la Universidad de Buenos Aires (UBA). También empezó a estudiar en la Universidad Nacional de las Artes (UNA) para adquirir la licenciatura en artes visuales.

Hasta hace un par de años atrás solo dibujaba por hobbie. Ahora trata de focalizarse en lo que es su verdadera pasión y anhelo: crecer en el mundo del dibujo. Busca aprender arte, cursos de dibujo o manualidades.

Inició en las Jornadas del Manga y Anime llevadas a cabo en el Jardín Japonés en 2014, y desde entonces participó en muchos eventos y talleres que la han convocado y/o autoconvocó.

Ella es creyente en que cuando comienza con una nueva etapa de su vida, no significa que aparece de un día para el otro; en el camino hay que probar muchas cosas siendo lo principal prepararse, estudiar y formarse en todos los aspectos.

“Nadie nace sabiendo, son pocos los privilegiados que son tocados con la varita de la genialidad, y como justamente ése no es mi caso, siempre sentí que las cosas sólo se logran con perseverancia acompañada de mucho trabajo y esfuerzo”.

En la biografía de Facebook contás que tu sobrenombre proviene de una larga historia ¿Te animás a contarla?

Por supuesto, tampoco es una historia del otro mundo. Como bien saben, Campanita (o Tinkerbell) es un personaje de la obra de teatro y novela de James Barrie, que mucho después llegaría a película de Disney como Peter Pan. Esa fue mi primera película Disney junto a la Sirenita. A mis 4 años de edad me gustaban mucho ambas, pero con el correr de los años se fue convirtiendo en el apodo y temática de mi vida.
Y no solo por el hecho de gustarme el hada en general; el carácter y personalidad de ella es muy parecido al mío (mucho más cuando se enoja), porque si hablamos de apariencia no nos parecemos mucho salvo corpóreamente, pero no soy rubia platinada ni de ojos azules, soy petisa y robusta como ella.
En la escuela, ya de grande en primaria, me gustaban tantas cosas que a ella la había olvidado. Luego en secundaria (época terrible para la gran mayoría, sobre todo los que dibujamos) era muy devota a Disney y no demostraba mucho que me gustaba el anime debido al miedo y burla que me podía llegar a causar. Obviamente no tenía mucho carácter en ese entonces y era el hazmerreír de mi clase siempre.
Para los últimos años de la secundaria, a punto de recibirme, ingresa a la escuela una chica muy  bonita, que hasta encima se parecía a Campanita: era más chiquita que yo, cinturita de abeja, pelo rubio (teñido pero al fin platinado) y ojos claros pero marrones, y vivía diciéndole que se parecía a ella. Cuestión que al quedarle ese apodo, a mí también me lo decían, porque además de incorporárselo a ella, cuando hacia dibujos los firmaba como campanitaaa y atrás ponía mi nombre. El “campanitaaa” con tres A al final surge de una equivocación, al querer firmar se me habían ido dos A de más. Después, al querer hacerme una cuenta DeviantArt, “Campanita” y “Campanitaa” ya estaban tomados, así que quedó directamente Campanitaaa.
Cabe destacar que mi otro seudónimo, que no utilizo con frecuencia, es Maelmedo, haciendo referencia a la primer silaba de mis nombres y apellidos.

Su amor por las casas desde chiquita.

¿Te acordás cual fue tu primer dibujo y qué era?

Desde muy chiquita comencé a dibujar. Recuerdo que mi principal influencia fue la televisión porque no tuve la suerte de que mi familia fueran lectores (poco y nada).

Deslumbrada por Sailor Moon, Dragon Ball, Cartoon Network, Nickelodeon, Disney y demás íconos que hoy ya lo vemos como retro a pesar de ser hace casi tres décadas atrás. Me dedicaba horas y horas a copiar las imágenes que me habían quedado grabadas a la hora de tomar el mate cocido por la tarde. Mi familia también me ayudaba comprándome lápices y fibras a montón para dibujar.
Como no había muchas cosas de esos personajes salvo álbumes de figuritas, fue así como comencé a hacerlos por mi cuenta. Hacía mis propias historietas y posters de mis personajes favoritos también.

Si hablamos del primer dibujo que realicé en mi vida, lo recuerdo perfectamente ya que mi mama lo tiene guardado. Diría que fue un intento de familia: eran personas muy deformes. Con los años, en preescolar y primaria dibujaba a mis ídolos mencionados y casas, muchas casas, muchísimas (no me pregunten, solo dibujaba casas porque me gustan mucho como hoy día, seguramente sea una de las aspiraciones a mi carrera).
Si me preguntan por el primer dibujo que hice de anime bien hecho y prolijo, fue uno de Cardcaptor Sakura a mis 17 años. Lamentablemente no lo tengo más porque lo regalé (si, en esas épocas solía regalar mis dibujos, no los valoraba como realmente debía).

¿Por qué te decidiste por una técnica tradicional?

No creo que lo haya decidido, creo que es lo más fácil que me ha resultado todos estos años por el hecho de que nunca varié del lápiz. Como dije antes, nunca estudié dibujo, mucho menos hice cursos o pensaba en utilizar otro elementos para explayarme en más técnicas. Sólo no lo pensaba, mucho menos digital (es algo que siempre me va a costar hasta no dedicarme de lleno).

La decisión de utilizar lápices policromáticos ¿tiene que ver con la búsqueda de mayor volumen en tus ilustraciones o tenés alguna otra razón?
Buena pregunta. Tengan en cuenta que siempre use lápices de colores de distintas marcas, pero siempre comunes. Nunca acuarelables ni grafito ni policromos.
Cuando descubrí estos últimos me di cuenta que, a diferencia de los comunes, son muchísimo más maleables. Es decir, son más fáciles de usar por ser blandos, de colores definidos, de materiales y tintes durables y con muchas variedades de colores, lo que te permite mezclarlos e integrarlos entre sí.
Por lo general estos lápices son caros, quizá por eso la gente no suele trabajar mucho en ellos. Actualmente las personas prefieren trabajar en Photoshop, SAI, Ilustrator o programas similares, cosa que yo no comparto. Para mí es más satisfactorio el trabajo hecho a mano, aunque hay que estar 4 ó 5 horas frente a una computadora, eso es admirable.

¿Cómo describirías tu proceso creativo? ¿Tenés algún “ritual” antes de ponerte a dibujar?

Mi proceso creativo… nunca había pensado un nombre o una descripción. Yo diría que evolutivo, porque a diferencia de años anteriores, no solía dibujar tan seguido ni pintaba o no tenía esos ánimos o la autoestima suficiente como para animarme a dibujar realmente, a diferencia de hoy día que ya tengo forjado un propio estilo. Por eso lo describo así, porque si me pongo a comparar dibujos de un par de años atrás con los de ahora, el estilo no se modificó mucho, pero sí evolucionó en otros aspectos: colores, volumen, perspectiva, proporciones, etc. ¿Y un ritual? Yo diría tener el tiempo libre y las ganas sobre todo. Eso sí, siempre tener a mano mis lápices, sino no existo. Y cuando digo siempre es SIEMPRE.

 

¿Qué es lo que buscás expresar en tus ilustraciones?
Depende del dibujo. Generalmente la gran mayoría de ellos son alegres y demasiado coloridos (básicamente vómito de arcoíris). Quizás es lo que siempre quiero expresar en ellos, que tengan una presencia y esencia que a quien lo mire vea no solo el esfuerzo, sino también el amor que dejo en cada uno de ellos.

En tu proceso evolutivo desde que comenzaste hasta ahora, ¿qué influencias o ejemplos tuviste para mejorar tu técnica?

Ufff, si vamos desde un comienzo, digamos que fue una suma de muchas cosas. No solamente el seguir ídolos y dibujar personajes favoritos, sino que también las personas que son hoy día mis colegas y en gran parte grandes amistades, quienes no solo me brindaron su apoyo en esto, sino que también son grandes artistas e ilustradores a quienes admiro y aprendo de ellos.

Los conocimientos adquiridos en la carrera de Arquitectura ¿aportaron en alguna medida a tu lado artístico en el campo de la ilustración?
Muchísimo. Hoy día puedo decir que tengo una cierta prolijidad a la hora del planteo del dibujo en cuanto al delineado y muchos otros aspectos gracias al lenguaje gráfico amplio que brinda la carrera. Ofrece las mayores posibilidades para el estudio de todas las disciplinas relacionadas con la arquitectura y el arte del dibujo. Aunque cabe mencionar que el dibujo de la arquitectura es una parte específica del dibujo en general, pero posee características propias dada la complejidad de los objetos arquitectónicos. Mi área específica en cuanto a los dibujos en general se basan en estilo anime, manga, comic y caricaturas. Procuro incorporar algo de mi carrera, pero prefiero hacerlo lo justo y necesario.

Magalí exponiendo sus trabajos en el encuentro de ilustradores en el emergente bar.

En los eventos donde participás para exponer tus trabajos se genera un ambiente de amistad entre otros colegas ¿Qué nos podés contar de esa experiencia? ¿Y la relación con el público?

En realidad eso depende mucho del evento, los artistas y el lugar. Si hablo por mí, soy demasiado sociable y no tengo problemas con nadie, ni siquiera con aquellos colegas que tienen cierta rivalidad entre ellos (porque la hay, no todo es color de rosa). De hecho he participado no solo de eventos de tópico anime, sino que también otros de un estilo más under, no tan allegado a las caricaturas. Desde mi experiencia, doy las gracias a quienes hoy por hoy se convirtieron en amigos y me dieron un empuje a mostrar y explayar en todos los ámbitos lo que soy capaz de hacer, cosa que hasta hace dos años atrás no prestaba importancia debido a mi baja autoestima y círculo interno. Si bien contaba con el apoyo de gente que me alentaba, no era lo suficientemente fuerte como para sostener una postura de artista y valorar mis dibujos como tal.

¿Qué hace para vos que una ilustración sea exitosa?

Dedicarle tanto tiempo como amor. He realizado trabajos con muy poco tiempo, los cuales resolví y quedaron de una manera que quizás yo no esperaba pero que dejó buenos resultados de todos modos. Pero eso deja a pensar el “si hubiese dedicado más tiempo, hubiese quedado de tal forma…”

¿Tenés algún proyecto soñado o pendiente en mente?

Por supuesto, no solo recibirme de arquitecta y ejercer la licenciatura, formar parte de un proyecto de diseño o dirección en obra, sino que también perfeccionarme en cada área de dibujo en cuanto a técnicas y estilos. No solo para mí, sino para el día de mañana abrir un pequeño estudio en el cual pueda brindar enseñanza tanto en el ámbito artístico como en el técnico. Sobre todo para enseñar también maquetería, que es un área dentro de la carrera que a muy pocos los veo con entusiasmo abarcar. Hoy día con toda la tecnología y tiempos acortados, la maqueta es algo tan a priori en una presentación final que muchos las mandan a hacer. Me gustaría poder reintegrar nuevamente el amor y la pasión de estar haciendo hasta la trama de una piedra o una madera.

Por último ¿Qué consejos les podés dar a los nuevos talentos que buscan crecer y vivir de la ilustración?

Ya dije que para mí es fundamental estudiar (para cualquier cosa que uno se proponga ser en la vida). De esta manera, aquellos a los que les gusta dibujar también ¡sepan dibujar! Conocimientos básicos permitirán a aquellos que aspiran a ser profesionales y vivir de la ilustración a dar los primeros y correctos pasos.
Yo recomendaría, contando mi experiencia, hacer alguna carrera artística o taller lo más abarcativo posible, ya que si bien uno puede saber qué tipo de ilustración o estilo quiere hacer, puede ser muy útil tener varias herramientas a disposición a la hora de trabajar.
Muchas veces mis colegas me han preguntado si me gustaría aprender acuarela, Photoshop, etc. Son cosas muy específicas y estaría bien hacerlas, pero a manera de complemento después de estudiar dibujo, composición, color, modelo vivo, perspectiva, historia del arte y técnicas básicas como óleo, acrílicos, grabado, collage, etc. En un principio algunas pueden parecer innecesarias si buscamos algo puntual, pero que considero fundamentales para formar una base firme donde poder apoyarse. Es mi manera de pensar hoy día, lo que no quiere decir que se pueda hacer los cursos específicos igualmente, pero creo que los resultados son diferentes.
Queda en la decisión de cada uno hasta dónde quiera llevar su labor y está bueno remarcar que nada se puede aprender de un día para el otro. Pueden haber caminos más cortos y tentadores (como cursos de pocos meses) que pueden servir, pero que en realidad hay que pensarlos como un complemento, como una etapa. En realidad uno nunca termina de aprender en líneas generales y es fundamental tenerlo presente. Los caminos cortos son eso, te pueden servir por un tiempo, ¡pero no te llevan muy lejos!
¡Y nunca cruzarse de brazos ni rendirse! Por más baja autoestima que tengan, NUNCA se menosprecien en lo que hacen. Si no sale, se practica, si sale y no te gusta, seguir practicando, si sale y te gusta, continuar hasta superarse.

Si querés saber más sobre ella y sus trabajos podes seguirla por:

FACEBOOK: www.facebook.com/campanitaaamaelmedo
INSTAGRAM: www.instagram.com/maelmedo
DIBUJANDO: campanitaaa.dibujando.net
TUMBLR: campanitaaa.tumblr.com